Las diputadas de oposición Sofía Cid, Carla Morales y María Luisa Cordero enviaron un oficio a los Ministerios de la Mujer y del Trabajo, solicitando acciones concretas para enfrentar la informalidad laboral en mujeres mayores. La preocupación surge ante cifras que evidencian que cerca de la mitad de las mujeres sobre 60 años trabaja en condiciones informales.
El informe, elaborado por Cipem (UDD-Los Héroes) en base a datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), reveló que la tasa de ocupación de adultos mayores llegó a 31,4% en el último trimestre móvil. Aunque muestra una leve mejora respecto a periodos anteriores, aún no se recuperan los niveles previos a la pandemia, donde se alcanzaba un 35%.
Un problema estructural que afecta a miles
El documento enviado por las parlamentarias destaca la necesidad de visibilizar el impacto de la informalidad laboral en mujeres mayores, quienes, tras años dedicados a trabajos de cuidado y labores informales, enfrentan su vejez sin protección social. “Estamos ante un menoscabo silencioso y persistente hacia las mujeres mayores; se les exige subsistir, pero se les niega un espacio digno y formal para hacerlo”, advirtió la diputada Sofía Cid.
Carla Morales, también firmante del oficio, señaló: “La informalidad se convierte en una trampa que limita el desarrollo profesional y personal de estas mujeres, quienes frecuentemente deben asumir roles de cuidadoras a costa de sus propias oportunidades laborales”.
Por su parte, María Luisa Cordero enfatizó: “No podemos limitar nuestro análisis a cifras frías. Detrás de cada estadística hay vidas concretas que, tras años de trabajo, deben enfrentar la precariedad como única opción”.
50% de las mujeres mayores de 60 años trabaja en la informalidad
Nataly Cornejo, especialista de Perzon.AI, advirtió que “los últimos datos entregados por el informe de Cipem-INE confirman una realidad alarmante: el 50% de las mujeres chilenas mayores de 60 años que hoy trabajan lo hacen en la informalidad”. La experta añadió que se trata de “más de 218 mil mujeres en esta condición, con un aumento de más de 10 mil casos en solo un año”.
Cornejo recalcó que la informalidad laboral en mujeres mayores refleja no solo un problema económico, sino una deuda estructural del mercado de trabajo: “No se trata solo de generar empleo, sino de diseñar oportunidades dignas, formales e inclusivas”, concluyó.
El oficio solicita información detallada sobre programas de reinserción laboral con enfoque de género, medidas específicas para reducir la informalidad laboral en mujeres mayores, y coordinación efectiva entre los ministerios pertinentes.
