Agencia Uno
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Este martes, a 48 horas de la suspensión de la Supercopa entre Huachipato y Colo-Colo, la ANFP reveló el informe arbitral de José Cabero, quien detalló los graves hechos de violencia ocurridos en el Estadio Nacional.

En primer lugar, el juez informó que “el partido se inició con 7 minutos de retraso debido a que un grupo de hinchas de Colo-Colo, ubicados en la zona norte, permanecían en la zona de exclusión realizando desórdenes”.

Posteriormente, Cabero señaló que “el entretiempo duró 28 minutos” debido a nuevos desmanes en el sector norte, donde barristas del cacique “se enfrentaron a Carabineros y los guardias de seguridad”.

Sin embargo, esto no fue todo. Puesto que, entre las incidencias, el referee detalló que “hinchas del club Colo-Colo lanzan petardos, bombas de humo y bombas de estruendo al ingreso de los equipos al campo de juego”.

“Durante todo el primer tiempo, hinchas del club Colo-Colo se mantienen arriba de las rejas de contención y seguridad instaladas en el sector norte de la pista de recortán, en zona de exclusión. Durante el entretiempo se registran graves enfrentamientos de hinchas de Colo-Colo con la seguridad privada y Carabineros en el sector de la galería norte, lo que provoca una suspensión momentánea del encuentro”, añadió.

En ese contexto, el árbitro consignó que ante la gravedad de la situación, el delegado del partido informó a albos, acereros y la cuaterna arbitral que el retorno a la cancha para el segundo tiempo se realizaría una vez existieran condiciones “favorables”, algo que no Colo-Colo incumplió.

“Pese a ello, el club Colo-Colo regresa a la cancha sin la autorización respectiva. Finalmente, el segundo tiempo se inicia con 12 minutos de retraso”, denunció Cabero.

El documento también especifica que durante el resto del partido los barristas de Colo-Colo permanecieron en el sector norte de la pista de recortán “lanzando asientos, trozos de concreto y otros objetos a la seguridad privada y Carabineros”, por lo que se decidió detener el encuentro en el minuto 78 para finalmente suspenderlo de forma definitiva.

“Tras la suspensión del partido, los hinchas de Colo-Colo ubicados en la galería norte siguieron enfrentándose con la seguridad privada y Carabineros, rompieron asientos y parte de la estructura que protegía la pista de recortán para lanzarlos hacia la zona de exclusión, incendiaron un sector de la galería norte y quebraron tablones del Memorial ubicado en la misma galería”, cerró el informe.

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