
Novak Djokovic (2° del mundo) tuvo un complejo partido en la segunda ronda de Wimbledon. El serbio dejó en el camino al británico Jacob Fernley (277°) en cuatro sets, en un partido que le trajo más de una complicación en su rodilla derecha.
Nole va tras su Grand Slam número 25 y también busca igualar la marca de ocho títulos en Wimbledon que tiene el suizo Roger Federer. De lograrlo, Djokovic se tranformará en el tenista más longevo en ganar el torneo londinense en la Era Abierta, con 37 años y 53 días.
Pero el serbio no solo batallaba con Fernley sobre el césped del All England Lawn Tennis, sino que también lo hacía con su rodilla derecha, recién operada tras su participación en Roland Garros. Nole lucía su rodillera gris, que le ayuda a estabilizar la articulación durante el juego.
En un partido ajustado, solo un quiebre por set fueron suficientes para que Djokovic se quedara con el partido por 6-3, 6-4, 5-7 y 7-5.
Pese a que su rodilla le quita movilidad y lo obligó a disminuir la cantidad de deslizamientos por partido, algo clásico en su tenis, con este triunfo Djokovic ha ganado 36 de los últimos 37 partidos que ha jugado en Wimbledon.
Además, el número dos del planeta sumó su victoria número 94 en Grand Slam, donde buscará alcanzar los 99 triunfos para superar a Serena Williams (98), Chris Evert (96) y Billie Jean King (95). Claro que aún está lejos del récord mundial de Martina Navratilova (120) y del máximo masculino establecido por Roger Federer (105).
En la próxima ronda, Djokovic se medirá ante Alexei Popyrin (43°) que viene de dejar en el camino al argentino número 30 del obre, Tomás Etcheverry, en cinco sets.