Los dueños de máquinas de entretenimiento o máquinas tragamonedas (que se encuentran fuera de los casinos), manifiestan su profundo rechazo al cambio en el proyecto de ley que pasó de regular el funcionamiento de las máquinas tragamonedas -como en la mayoría de los países- a enviar una indicación que pretende prohibirlas definitivamente.
Para el vicepresidente de FIDEN, Ramón Sepúlveda, agrupación que reúne a casi mil 400 socios de locales, “esta situación es un acto de discriminación hacia una sector de la población, hacía la posibilidad de entretenimiento de la clase media y otros sectores que no tienen los recursos para estar pagando una entrada -por ejemplo- para ir a un casino”, indicó Sepúlveda.
El dirigente hizo hincapié en que iban en buen pie para regular su funcionamiento, ya que a la fecha “cumplimos con toda normativa, pagamos impuestos como todos los comerciantes, pero de un día para otro comenzó una brutal campaña de desprestigio con allanamientos y otras situaciones que más bien son un montaje comunicacional y creemos que viene de parte de un sector que pretende sacarnos del mercado: los casinos”, insiste el vicepresidente de FIDEN.
Cabe mencionar que esta organización solo respalda a los comerciantes que funcionan con los respectivos permisos que a la fecha son entregados por los municipios, “en ningún caso nos hacemos eco de aquellos lugares que están fuera de toda reglamentación, eso lo rechazamos, precisamente por eso es que llevamos años luchando por ser regulados de forma clara y homogénea como muchas otras actividades, pero a la fecha no lo hemos conseguido”, señala Sepúlveda.
Ramón Sepúlveda, vicepresidente de FIDEN, recalca que como otros sectores en Chile “se pretende eliminar a los pequeños y medianos empresarios, para dejar en manos de unas familias el rubro del entretenimiento. No es posible pensar que las máquinas de barrio o de locales son malas y las de casinos son buenas, eso es una burla para la inteligencia de la ciudadanía y el efecto de la colusión y concentración económica de la que Chile sigue siendo abusada, concluyó el dirigente.