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La pandemia modificó todo y eso ya es sabido. La industrias de las finanzas o inversiones fue de las más afectadas, no solo por sus formatos arcaicos sino también porque dio el paso, sobre todo en Chile, a una ley que regulará entidades financiera digitales, elevando su nivel y posicionándose de manera competitiva con la banca tradicional.

Según el estudio “Digital Banking Maturity”, de la consultora Deloitte, demostró que la industria ha avanzado en sus niveles de digitalización, pero solo un 10% se encuentra en el sector de “campeones digitales”, osea los más avanzando. El estudio incluyó a 304 bancos de 41 países que luego del análisis, fueron agrupados en cuatro categorías, rezagados digitales, adoptantes digitales, seguidores inteligentes y campeones digitales.

Nuestro país fue representado por siete entidades financieras, las cuales se posicionaron entre rezagados digitales y adoptantes digitales. “En los últimos años hemos visto como los banco avanzan en sus portales digitales o aplicaciones móviles, sin embargo, el principal problema radica en sus procesos internos, los cuales siguen siendo muy manuales, repercutiendo en demoras y mala experiencia al cliente”, señala Herbert Schulz, CEO de Radar.

El experto enfatiza y explica el porqué el principal problema se encuentra en los procesos internos, “se debe a dos grandes puntos, al menos en Chile, primero es que los sistemas son heredados, esto significa que viene de generaciones atrás y es muy difíciles de reemplazar y adoptar una digitalización. Y en segundo lugar, es que la mayoría de los bancos son resultado de fusiones con otros bancos y eso se refleja en sus sistemas”. 

Por ello, es que el 2023 será un año de grandes desafíos con una Ley Fintech ya aprobada y a la espera de comenzar su implementación en los próximos meses. “Las fintechs pasarán a ser instituciones reguladas, lo que las transforma en competidores más sólidos para actores tradicionales. Además, la nueva ley establece un sistema que obliga a instituciones financieras a disponer información de sus clientes para que otros actores puedan ofrecer más y mejores servicios”, finaliza el CEO de Radar.

Ahora bien, tanto el experto como el estudio de Deloitte, enfatizan en que el nivel de Chile está muy similar en lo que respecta a su pares en otros países, pero es importante que la banca tradicional evolucione de la mando con las nuevas legislaciones para no perder parte del camino recorrido.

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