En la temporada anterior las fuertes heladas provocaron la pérdida de la mitad de las ciruelas chilenas.
Esta situación se ha revertido y en 2014-2015 la exportación ha superado los 11,5 millones de cajas.
Los exportadores destacan que, sin embargo, esta ha sido una temporada normal y que la demanda está estancada.
“Se ha estancado por falta de innovación genética que mejore las variedades actuales, falta sabor o calibre en muchas de ellas, especialmente las tempranas”, comenta un exportador.
Las variedades Larry Anne (+118,9%) y Angeleno (+95,2%) son las que mayor crecimiento han experimentado, debido a su buen calibre la primera y por ser tardía la segunda, lo que permitió llegar a los mejores mercados en el mes de abril-mayo.
Fuente: Fresh Plaza