Carlos Williams, locutor y concejal, se desempeñó como la “voz oficial del Everton” en el Estadio Sausalito sin recibir un peso, por 20 años. No obstante, esta función llegó a su fin luego de que la alcaldesa de Viña del Mar, Virginia Reginato, decretara una polémica resolución.
Si bien Williams acusa “persecusión política”, desde la municipalidad se defienden asegurando que esta determinación corresponde a que “se prohibió que personas que no tengan la calidad de funcionarios municipales ejerzan labores de animación y/o locución en recintos municipales“, de acuerdo al sitio local Pura Noticia.
Sin embargo, esta medida afectaría al Festival de Viña del Mar, que está a solo semanas de concretar su realización. En base a este decreto, el Festival no podría ser animado por Martín Cárcamo y María Luisa Godoy, ya que ninguno de los dos es funcionario de la municipalidad.
En esta línea el concejal Sandro Puebla explicó que, de realizarse dicha regla, el Festival “sólo podría ser animado por un funcionario municipal, lo que es absurdo“.
Puebla se refirió a esta medida con el matinal “Contigo en la Mañana”: “Es un berrinche que los hace tomar decisiones sin pensar; los hace tomar revanchas de un concejal (Williams) que no ha sido incondicional a su administración”.
Además el concejal señaló que recurrió a la Contraloría Regional de Valparaíso para que exista un pronunciamiento oficial sobre esta medida. “Si se ratifica el criterio de la alcaldesa, se deberá notificar a los canales la necesidad del cambio de animadores, lo que también voy a plantear en la Comisión Organizadora“, sostuvo la citado medio.
El municipio se refirió a esta medida que podría afectar a la dupla de TVN y Canal 13, de manera bastante escueta: “El contrato entre el municipio y los canales de televisión estipula que son ellos quienes eligen a los animadores del Festival“, expresaron a Publimetro.