Pancho y Jorge decidieron conocer Fes, la tercera ciudad más grande de Marruecos y conocida por ser el centro cultural y religioso del país. Partieron desde Merzouga y recorrieron los 469 kilómetros que separan ambas ciudades.
En Fes, se juntaron en la medina con un experto en historia marroquí, quien los llevó a conocer el abundante comercio de sus calles, hasta llegar al barrio de los curtidores, tan típicos de esta ciudad. Entraron a una tienda con grandes piezas de cuero de vaca, cordero y dromedario, además, gran variedad de productos, como carteras, bolsos, cinturones, chaquetas, entre otros.
Los pasillos de las tiendas de cuero, llevan a las grandes piscinas donde se trabaja este material y que resultó ser uno de los cartones postales de Fes, el barrio de los curtidores de piel que data del siglo XIV.
Pancho y Jorge se despidieron de Marruecos, felices de haber conocido esta cultura y destacaron la calidez del pueblo marroquí algo que, sin duda, marcó a estos viajeros.
En “Socios por el mundo”, ambos amigos conversaron cuál sería su próximo destino y Jorge decidió que España es el próximo país, pues desea ir a Bermeo, en el País Vasco, que es la tierra de su abuelo.
Adiós Marrueco, hola sur de España
Es así como Jorge y Pancho toman un avión y la primera parada en la península Ibérica fue Córdoba, la joya del sur de España, donde se mezcla la cultura del Imperio Romano, la cultura árabe y la española. Aquí Jorge, el más aventurero decidió recorrerla en bicicleta, incluyendo las maletas de Pancho.
La primera construcción que llamó la atención de los viajeros fue la gran Mezquita Catedral de Córdoba, uno de los monumentos más importantes de la cultura andaluza y que junto a sus calles aledañas son Patrimonio Cultural de la Humanidad.
Los “socios” llegaron a un restorán donde la especialidad eran la tortillas de patatas de enorme tamaño con cinco kilos de peso, sin embargo, por ser consideradas las mejores de Córdoba, no pudieron presenciar cómo se cocinaban, pues tenían un secreto que no era revelado a nadie, “el secreto mejor guardado de Córdoba”, según Zabaleta.
Otras de las tradiciones de esta ciudad y toda España, es el jamón ibérico, y estos amigos no se resistieron para probarlo, junto a uno de los mejores vinos de la zona, con una particular forma de servirlo. Continuando con las comidas típicas de Córdoba, Jorge y Pancho entraron a una casa donde la especialidad era el “salmorejo”, sabroso plato típico a base de tomates, aceites, ajo y miga de pan.
En tanto, los amigos escogieron la noche para conocer la gran Mezquita Catedral, edificio emblemático de esta ciudad andaluza, cuya primera construcción data del año 786 y hoy es un edificio de 27 mil metros cuadrados. Junto a un experto, Pancho y Jorge caminaron por el interior de este sagrado edificio donde conocieron su historia, arte y religiosidad, tanto cristiana como musulmana.
Finalmente, en “Socios por el mundo”, los viajeros recibieron una especial invitación, conocer lo mejor de la tradición del flamenco cordobés, con el reconocido “cantaor”, Manuel Moreno Maya, más conocido como “El Pele”. Vestidos de manera más formal, Pancho y Jorge, asistieron a la música y al baile flamenco, donde practicaron junto a unos experimentados bailarines, todo esto en un hermoso jardín, al mejor estilo de la ciudad andaluza.