Canal 13
Comparte

Esta noche, en un nuevo capítulo de “Juego textual”, Katty Kowaleczko, “Tita” Ureta, Begoña Basauri, María Jimena Pereyra, “Pepi” Velasco, Rayén Araya y Yazmín Vásquez conversarán con el locutor y animador Leo Caprile.

El rostro televisivo, con más de 35 años de carrera, recordará la manera en que algunas figuras de la TV antigua maltrataban a la gente. “Vi nepotismo, prepotencia, maltrato, había directores y productores que eran unos hijos de p… y les gustaba castigar a la gente. Hoy en día eso es imposible, hoy levantas la voz y pones una denuncia”, sostendrá.

A propósito de lo mismo, se referirá a uno de sus programas más recordados, “Casi en serio”, donde uno de sus elementos más novedosos era que las modelos “hablaban por el ombligo”. Al respecto, explicará que no lo considera un elemento sexista.

“Eso se dio orgánicamente. Era un programa que no tenía recursos y construimos un programa que era una atmósfera, donde todos aportábamos algo. A las modelos las llevaban gratis, entonces desfilaban y ganaban plata con la tienda que las vestía, y teníamos que sacar un contenido con eso. No era algo contra el sexo, era algo utilitario, lo hacíamos con modelos hombres también”, asegurará.

Consultado sobre si se arrepiente de ese recurso, Leo reconocerá que “había una cierta cosificación de las personas” en el programa. Además, sostendrá que “si llegase a arrepentirme sería burdo y falso, pero sí me arrepiento de cómo veíamos a los compatriotas, a la gente, a los vecinos. Yo me crié en un país homofóbico, de tiranía, de odio, donde aún nos dividimos entre fachos y comunistas, y me arrepiento de no haber estado un paso más adelante culturalmente”.

En otros temas, hablará de la pérdida de su madre hace 14 años, tras padecer de demencia senil por un tiempo. “Pocos días antes de morir, me echó. ‘Váyase de aquí’, me dijo. No me reconoció. Fue muy chocante”, indicará, contando que eso lo marcó tanto que incluso lo hizo estar ausente de su fallecimiento.

“Íbamos con la familia a verla un fin de semana a Viña y dije ‘Vámonos, devolvámonos, es una falsa alarma’. Yo sabía que estaba mal y nos vinimos igual. Llegamos a la casa y nos anuncian que había muerto. Ahí me di cuenta de que me había escapado, no habría aguantado verla”, confesará, agregando que después, ya frente a su cadáver, le pidió perdón por no haber estado.

Además, consultado sobre el Festival de Viña, Caprile admitió que le habría gustado animarlo. “No me llamaron nunca. Cuando el Festival lo tenía un canal yo estaba en el otro siempre. Hay que estar parado en el momento preciso, y los festivales lo buscan a uno, no uno a los festivales”, dirá.

Últimas Noticias