Britney Spears lanzó duras confesiones en un extracto de sus memorias. La artista creyó que su familia “intentaba matarla” durante los 13 años que se mantuvo bajo la tutela familiar.
Todo comenzó en 2008, cuando fue llevada a un hospital psiquiátrico tras el episodio en donde se encerró con su hijo Jayden en un baño. En este contexto, la estrella pop se habría sentido en peligro al ser retenida por su círculo familiar.
Producto del hecho, Jamie Spears, padre de la cantante, presentó los papeles para obtener la tutela. “En varias ocasiones me resistí, especialmente cuando mi padre me quitó el acceso a mi teléfono móvil”, recordó.
“Y esta es la triste y honesta verdad: después de todo lo que había pasado, no me quedaba mucha fuerza dentro. Estaba cansada y también asustada. Después de que me retuvieron en una camilla, sabía que podían inmovilizar mi cuerpo cuando quisieran. Podrían haber intentado matarme, pensé. Empecé a preguntarme si querían matarme”, reveló en “The Woman in Me”.
Los sentimientos de temor contra su familia retornaron cuando la intérprete de ‘Toxic’ intentó pedirle ayuda a su hermana ayuda, Jamie Lynn Spears, cuando el padre la obligó a entrar en rehabilitación. “Deja de luchar contra ello”, habría respondido Jamie Lynn.
“Junto con el resto de ellos, ella seguía actuando como si yo fuera una amenaza de alguna manera (…) Esto parecerá una locura, pero lo diré otra vez porque es la verdad: pensé que iban a intentar matarme“, contó Spears.
Tras salir de rehabilitación, “se me pasó por la cabeza que solo me visitaban para rematar lo que habían empezado unos meses antes, para matarme de verdad”, rememoró.
“Si eso suena paranoico, consideren todas las cosas por las que había pasado hasta ese momento: las formas en que me habían engañado e institucionalizado“, advirtió.