Carabineros de Chile adquirió hace meses, antes del homicidio de Camilo Catrillanca, cámaras que impiden la manipulación o destrucción del video.
Francisco del Campo, director general de Smart Partners representante de Axon en Chile, afirmó que la adjudicación de las cámaras se realizó en julio de 2018 por 42 millones de pesos, con IVA, según informa El Mercurio.
Además, agregó que “meses antes del caso Catrillanca, ya estábamos trabajando con Carabineros para incorporar cámaras corporales en un proceso que implicó una licitación y un análisis minucioso de las soluciones que operaban en otras policías a nivel internacional. Carabineros adquirió 30 de estas cámaras y se están afinando los detalles para su pronto lanzamiento”.
En la misma línea, del Campo añadió que “las nuevas cámaras adquiridas tienen protocolos de seguridad que aseguran que el video grabado sea inviolable. Esto porque se almacena internamente y está encriptado. Solo un usuario con los permisos administrativos necesarios puede acceder a él con su contraseña”.
El video guardado además es descargado automáticamente en puntos con conexión y respaldado en la nube para que distintos actores del proceso judicial puedan acceder a él, según informa la misma publicación.
Por otra parte, del Campo aclaró que “se puede configurar para que la cámara grabe cuando se enciende la sirena del auto, pero también para que lo haga cuando el funcionario desenfunda el arma. Esto último no solo enciende la cámara de ese funcionario, sino de todos los que están a su alrededor”.
Agencia Uno