El Director Ejecutivo de la Fundación Paz Ciudadana, Daniel Johnson, conversó con La Mañana de Agricultura sobre el avance del crimen organizado en el país.
“Lo que queda claro, como primer aspecto es que si hay organizaciones delictuales, que están cometiendo delitos en el país y que están generando un daño muy importante. Hay una sensación de que el mayor daño está en la violencia y en los homicidios, eso es una manifestación de las organizaciones delictuales, pero no es el principal negocio” sostuvo.
“Puede ser que en los próximos años veamos que los homicidios bajen significativamente, aunque eso no significa que el crimen organizado haya bajado en Chile. Los homicidios son un síntoma de instalación de organizaciones delictuales. Cuando ya hay alguna que toma el control del territorio y empieza a operar, los homicidios se convierten en algo no deseable para estas organizaciones, les entorpece su negocio, explicó.
Respecto al rol que debiesen jugar las instituciones responsables, Johnson declaró que “por un lado, lo que parece evidente, que es perseguir al crimen organizado, para que podamos detener a quienes lideran estas bandas y así pensar que podemos bajar la cantidad de operaciones del crimen organizado en Chile”.
“Para poder hacernos cargo del crimen organizado completo, lo que recomiendan los organismos internacionales, establecen las cuatro “P”, la primera es la prevención. Es fundamental, hay que prevenir la instalación del crimen organizado en ciertos mercados, no solo la violencia es la manifestación del crimen”, señaló.
“El primero que se nos viene a la cabeza es el tráfico de drogas, pero también está la trata de personas, el robo de cátodos de cobre en el norte, el robo de madera en el sur, el robo de salmones. Todos estos mercados hay que protegerlos“, sostuvo el director.
“Los segundo es la Protección, es lo que pasó en el norte cuando se supo el nombre de testigos protegidos, eso es grave porque hay que proteger a víctimas, testigos y funcionarios de las instituciones que tienen que hacer el trabajo, a fiscales, a jueces”, remarcó.
“La tercera P, es el Perseguir. No podemos quedarnos con la detención de los eslabones más débiles, tenemos que ir por los líderes de estas organizaciones, lo otro es seguir la ruta del dinero”, comentó.
“La última es Partnership, que en la práctica es generar asociaciones entre las distintas instituciones y asociaciones público-privadas, que permitan hacer cruces de información que nos ayuden a cumplir todo, a prevenir, a proteger y a perseguir“, sentenció.
“Lo que nosotros promovemos y en lo que estamos en conversación con el Ministerio del Interior, es que se le den capacidades a este nuevo Ministerio de Seguridad para poder planificar, para coordinar las instituciones y poder evaluar su resultado. El delito cambia mucho más fácil que cualquier otra institución en el país, muta muy rápido”, manifestó
“Hay que separar el rol político del Ministerio del interior con el rol de la seguridad. Por eso se crea el Ministerio de Seguridad (…) Es un cambio importantísimo”, agregó.