Tras reunirse con el presidente de la Corte Suprema, Ricardo Blanco, el ministro de Justicia, Luis Cordero, se refirió a la autorización del juez Daniel Urrutia para que reos que están en la Cárcel de Alta Seguridad puedan interactuar a través de videollamadas.
“El Ejecutivo ha sido claro sobre este punto: la decisión del juez Urrutia, en nuestra opinión, infringe las normas que regulan el derecho penitenciario, particularmente aquellos que están vinculadas a establecimientos de máxima seguridad”, dijo Cordero.
“En esto el Ejecutivo ha sido muy enfático: las regulaciones de establecimientos de estas características, las características de las personas que están privadas ahí y la condición procesal en que se encuentran exige que, respecto de ellas, las comunicaciones telemáticas estén completa y absolutamente restringidas, que no es lo mismo que estén restringidas sus visitas“, explicó.
En esa línea, insistió que “no está en discusión” el derecho de los presos a recibir visitas, sino que “la posibilidad de que exista comunicación telemática a través de un establecimiento de máxima seguridad con personas que se encuentran fuera del país“.
Cordero recalcó que “en opinión de Gendarmería, y en opinión del Gobierno, eso compromete la seguridad del establecimiento y la condición de máxima seguridad del establecimiento“.