Las piscinas son ideales para disfrutar del verano, pero también conllevan riesgos, especialmente para los niños.
Con estas medidas de seguridad, evitar accidentes será más sencillo.
Supervisión constante y reglas claras
Nunca pierdas de vista a los niños mientras estén cerca o dentro de la piscina. Un adulto debe supervisar siempre, incluso si los pequeños saben nadar. Además, establece reglas como no correr, no empujar y no entrar al agua sin permiso.
Protección en casa
Si tienes piscina propia, instala vallas perimetrales con puertas automáticas, cubiertas de seguridad y alarmas de agua. También, ten flotadores y equipos de emergencia a la mano.
Enseñanza y prevención
Inscribir a los niños en clases de natación mejora su seguridad en el agua. Los adultos deben aprender maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) para actuar en emergencias.
Cero distracciones
Evita el uso de celulares u otros dispositivos mientras supervisas. La atención exclusiva puede salvar vidas.