El proyecto de reguardo de la infraestructura crítica por parte de las Fuerzas Armadas requiere de 93 votos en la Cámara de Diputado, de un total de 155. Este apoyo, según el diputado Giorgio Jackson (RD), no está.
En entrevista con “La Mañana Interactiva” de Agricultura, el parlamentario dijo que en el actual contexto en que “estamos en la mayor crisis de DD.HH. desde el retorno de la democracia” no es una buena idea para que se aplique, especialmente por los baja confianza que existe en las fuerzas de orden,
“La solución para los hechos de violencia que han ocurrido sea sacar los militares a las zonas críticas (…) con una especie de luz verde para que no reciban ningún tipo de castigo posterior en el caso que se violen los DD.HH. y que se actúe fuera de la ley, la verdad es que nos parece absolutamente desproporcionado y solo va a generar mayores situaciones de violencia”, dijo.
Además, dijo que el Gobierno “no ha hecho el trabajo de conversación con las distintas bancas para recoger las diferencias que existen con respecto a este proyecto”.
“Mi impresión es que no va a tener los votos de necesarios para ser aprobados en los términos en que está ahora. El Gobierno erra la aguja y la dirección de sus prioridades”, señaló Jackson. “El proyecto de zonas críticas no es de las prioridades que las chilenas y chilenos están pidiendo hoy día para salir de esta crisis social”, agregó.
El parlamentario criticó la posición del Gobierno de aplicar “mano dura”, lo que, según él, no genera una cohesión en la población. “Hay un déficit gigante de liderazgo en la Presidencia de la República para poder generar un relato que nos pueda permitir a la población chilena tener una motivación de un país distinto”, dijo.
En esta misma línea, añadió: “Nosotros creemos que que eso está en el Apruebo, en la opción de la Convención Constitucional porque no genera un 50% de desginados en el congreso, por hacemos la autocrítica de que probablemente desde el Congreso que tenemos una baja credibilidad como institución”.
Desde esta autocrítica, indicó que el “el gobierno, mi impresión, es que le echa la culpa al empedrado todo el tiempo. Todos tienen la culpa menos el Gobierno, pareciera”.