Este primer sábado de noviembre, el animador “Pancho” Saavedra visitó el archipiélago de Calbuco, en la Región de Los Lagos, en un nuevo capítulo de “Lugares que hablan”.
En esta zona, el conductor de TV recorrió el Santuario de la Naturaleza más pequeño del territorio nacional, la isla de la Lagartija, nombre otorgado por su forma. Además, visitó las Isla Quihua, Huar y, finalmente, la isla más alejada del archipiélago, Queullín, donde sus habitantes recibieron luz eléctrica recién en marzo del 2021.
En este recorrido por la comuna de Calbuco, el programa de cultura de Canal 13 arribó hasta la localidad de Dao para reunirse con un grupo familiar de valerosas mujeres que desde niñas han recolectado mariscos en la isla Lagartija, declarada Santuario de la Naturaleza desde 2017. A través de este esforzado trabajo, las mujeres mayores han logrado que las nuevas generaciones puedan acceder a estudios universitarios.
Luego, Saavedra llegó a conocer a uno de los últimos pulperos que quedan en la zona. El hombre le contó a “Pancho” que este oficio se está perdiendo, debido a lo difícil que es extraer este molusco del fondo del mar y a lo inestable de este trabajo. En esta secuencia se pudo ver cómo el hombre bajó al fondo marino para conseguir este alimento.
Sin duda, la historia que conmovió el corazón de los televidentes fue la de una joven y luchadora mujer de la Quihua: ella junto a su familia viven de la agricultura. Sin embargo, la historia de Angélica fue sobrecogedora; madre de dos hermosas niñas que nacieron con parálisis cerebral, tuvo que dejar su trabajo y volver a vivir con sus padres. Junto a su hermana, crearon un apetecido producto originado del ajo chiltote: el ajo negro. Hoy convertida en productora de este ingrediente, que es solicitado en la cocina gourmet y usado en el área de salud alternativa, por sus innumerables cualidades. Gracias a este producto y a sus enormes betarragas, ha logrado sacar adelante a sus gemelas.
Continuando el recorrido por el archipiélago de Calbuco, el comunicador visitó a un hombre de 92 años y fanático de Colo-Colo quien toda su vida se dedicó a dibujar las zapatillas y zapatos de una conocida fabrica. Este hombre, junto a su esposa, recibieron al conductor de “Lugares que hablan”, que le llevaba un preciado regalo, la camiseta de Colo Colo firmada por todos los jugadores del plantel.
Al final del trayecto, el programa de cultura más reconocido de la televisión chilena desembarcó en la isla más alejada del archipiélago, isla Queullín, conocida como la “isla del ajedrez”, porque los niños, gracias al esfuerzo de los profesores, aprendieron este juego convirtiéndose en campeones regionales, viajando al extranjero para representar a Chile.
En la isla Queullín, “Lugares que hablan” vivió otro momento importante. En marzo de este año recién llegó la luz eléctrica a la isla, gracias a la insistencia de todos los vecinos. “Pancho” Saavedra acompañó a una mujer quien por primera vez instalaba una lavadora en su casa. Junto a esta familia, Pancho ayudó a la instalación y al primer uso de este artefacto.