Sebastian Cisternas/ Aton Chile.
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En una visita de 48 horas a Euskadi, como se conoce localmente al País Vasco, en España, el ministro de Vivienda, Cristián Monckeberg, se reunió con las principales autoridades de la región y con algunos actores protagónicos del llamado “milagro de Bilbao”.

Se trata de un esfuerzo multisectorial que permitió transformar a una zona industrial deprimida, a mediados de los años 80, en un polo de interés turístico y cultural y de paso en uno de los mejores ejemplos a nivel mundial en materia de regeneración de ciudades, integración habitacional y transformación urbana.

El interés de Monckeberg apunta a buscar fórmulas que fortalezcan el modelo que se aplicará en Chile, en la serie de grandes intervenciones urbanas que le encargó el Presidente Sebastián Piñera en el mes de marzo, entre las que figuran, por ejemplo, el nuevo Eco Parque para Santiago y la transformación del Muelle Barón, en Valparaíso.

Para Monckeberg, “lo que nos entregó el Presidente Piñera no es solo la ejecución de nuevas áreas verdes o la instalación de bancos y juegos. Lo que nos pidió fue hacer esfuerzos por cambiarle la cara a las ciudades del país a través de obras urbanas de gran impacto, que no solo mejoren la calidad de vida de sus habitantes, sino que les entreguen nuevas herramientas de desarrollo cultural, económico y turístico. En eso, el ejemplo de Bilbao y de Vitoria, que es una de las capitales verdes de Europa, es de estudio obligado”.

Con eso en mente, en España, Monckeberg cerró un convenio de colaboración e intercambio de conocimientos en materia de vivienda y desarrollo urbano con la Diputación Foral de Biskaia, representada por Unai Rementería y ya está preparando otro con el gobierno vasco, con cuyo presidente, Iñigo Urkullu, se reunió en el palacio del Enea de Ajuria, en la capital Vitoria-Gasteiz, y que espera concretar durante su visita a Chile, a fines de octubre.

Si a mediados de los años noventa, el PIB per cápita de los habitantes del País Vasco se empinaba por los 13.800 euros (1995), hoy esa cifra alcanza los 33.088 euros (2017) -el PIB per cápita general en España es de 25.100 euros.

En esa evolución tiene mucho que decir la recuperación de la zona industrial en la zona del río Nervión, en Bilbao, con la construcción del museo Guggenheim, inaugurado en 1997, la limpieza a la que se sometió el cauce y la construcción de otros íconos, como el palacio Euskalduna, como centro de convenciones.

También fueron fundamentales el “anillo verde” de Vitoria Gasteiz, el gran cordón de parques que rodea la capital provincial, el aeropuerto y la red de metro, tranvía y buses que une a todos los municipios de Euskadi.

Respecto al Guggenheim, resistido fuertemente por la población durante la etapa de diseño y construcción, se estima que el 90 por ciento de quienes lo visitan son extranjeros y que en sus veinte años de vida ha generado ingresos equivalentes a ochenta veces lo que costó su desarrollo.

La agenda de Monckeberg incluyó a los alcaldes de Bilbao y Vitoria Gasteiz, Juan Mari Aburto y Groka Urtarán respectivamente, con los que compartió la relevancia que tuvieron los ayuntamientos en el desarrollo de la región.

A ellos los invitó a compartir experiencias con sus pares chilenos, lo que podría concretarse prontamente en un seminario internacional que prepara el Minvu para las próximas semanas, enfocado en la regeneración de ciudades e integración urbana.

A ese encuentro estarán invitados también destacados urbanistas y arquitectos europeos, como el español Alfonso Vergara, director de la Fundación Metrópoli, con quien también se reunió en Madrid, antes de su regreso a Chile.

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