El ministro del Interior francés, Gérald Darmanin, anunció este domingo que el próximo martes se desplegarán 11.000 policías y gendarmes en respuesta a una nueva jornada de protestas contra la reforma de las pensiones.
Darmanin ha publicado un mensaje en Twitter en el que anuncia la cifra de agentes movilizados y advierte de la llegada de “miembros de la ultraizquierda desde el extranjero”. Por ello ha emitido 17 prohibiciones administrativas para posibilitar que se les niegue la entrada en el país y “si es necesario, facilitar su arresto”.
Del total de 11.000 efectivos, 4.000 estarán en la capital, París, “para garantizar la seguridad de las manifestaciones y garantizar el derecho a manifestarse”.
Se esperan entre 400.000 y 600.000 manifestantes, según una nota interna de los servicios de inteligencia recogida por la televisión BFMTV. De ellos, entre 40.000 y 70.000 estarán en la capital, de los cuales unos 1.000 serían “elementos radicales”: 200-300 de “ultraizquierda” y ultras de los ‘chalecos amarillos’.
Los sindicatos han convocado la 14ª “jornada de acción” para exigir la derogación de la reforma de las pensiones y la subida de la edad de jubilación de 62 a 64 años. Este mismo jueves la Asamblea Nacional estudiará una propuesta para derogar la reforma presentada por el Grupo Libertades, Independientes, Ultramar y Territorios (LIOT).
Este domingo el Diario Oficial ha publicado varios decretos que ponen en marcha las medidas incluidas en la reforma de las pensiones, como la subida de la edad de jubilación o las nuevas normas para el cálculo de la pensión.