Alrededor de 30 personas murieron y decenas resultaron heridas en un nuevo ataque ejecutado por el Ejército de Israel contra el campamento de refugiados de Yabalia, el más grande de la Franja de Gaza, que en esta ocasión habría alcanzado una escuela de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos en Oriente Próximo (UNRWA)
Según las informaciones recogidas por la agencia palestina de noticias WAFA, al menos 27 personas murieron en el ataque contra este centro, que la agencia Maan identificó como una instalación de la UNRWA, mientras que otras dos personas fallecieron tras ser alcanzado un vehículo en el mismo campamento.
El Ejército de Israel no se pronunció por ahora sobre el bombardeo, el tercero en otros tantos días en Yabalia.
La UNRWA indicó el miércoles que hasta ahora se confirmó la muerte de 70 de sus trabajadores en Gaza, a donde realizó una visita el comisionado del organismo, Philippe Lazzarini, quien subrayó que cada día “se vuelve más sombrío” a medida que siguen muriendo sus compañeros, y resaltó que la agencia se quedará en Gaza para “permanecer” junto a los palestinos refugiados y el resto de sus comunidades.
El organismo señaló este mismo jueves que alrededor de 690.000 desplazados internos se encuentran refugiados en 149 instalaciones de la UNRWA.
What happened and continues to happen in the📍#GazaStrip is forced displacement.
— UNRWA (@UNRWA) November 1, 2023
More than 670,000 people are sheltering in nearly 150 overcrowded @UNRWA installations.
These people face deteriorating humanitarian conditions and severe health and protection risks. pic.twitter.com/dqO8Zu5GGX
“Nuestros refugios están cuatro veces por encima de su capacidad y las condiciones de sobrepoblación siguen creando graves preocupaciones a nivel sanitario y de protección”, dijo en un mensaje en su cuenta en la red social X.
Por su parte, las autoridades de la Franja, controlada por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), indicaron este mismo jueves que 195 personas murieron en los dos bombardeos ejecutados el martes y el miércoles por el Ejército de Israel contra el campamento de refugiados, que dejaron además 777 heridos y 120 desaparecidos bajo los escombros, por lo que no se descarta que el balance de fallecidos pueda aumentar durante las próximas horas.
El Ejército de Israel afirmó tras el bombardeo del martes que el ataque se había saldado con la muerte de “cerca de 50 terroristas”, entre ellos el comandante del Batallón Central Yabalia de Hamás, Ibrahim Biari, “uno de los líderes” de los ataques ejecutados el 7 de octubre por el grupo islamista, al tiempo que reconoció que había causado un número no especificado de víctimas civiles.
Israel lanzó una ofensiva militar que incluye desde hace días operaciones terrestres en respuesta a los ataques ejecutados el 7 de octubre por Hamás, que dejaron cerca de 1.400 muertos y más de 240 secuestrados, según los balances facilitados por las autoridades israelíes.
Las autoridades de la Franja de Gaza, controlada por Hamás, elevaron este mismo jueves a más de 9.000 los muertos por la ofensiva de Israel, mientras que la Autoridad Palestina denunció más de 130 muertos en las operaciones de las fuerzas de seguridad y ataques por parte de colonos desde el 7 de octubre.
Agencia Uno – Europa Press.