
Halloween es una noche llena de disfraces y muchos dulces, pero también representa un reto para la salud bucal de los niños.
Con algunos cuidados sencillos, es posible disfrutar sin comprometer los dientes.
1. Escoge dulces menos dañinos: Los chocolates se disuelven rápido y no se pegan tanto como caramelos o gomitas, que aumentan el riesgo de caries.
2. Beber agua después: Un vaso de agua ayuda a eliminar restos de azúcar y neutraliza los ácidos de la boca.
3. Mantén la higiene bucal: Refuerza el hábito de cepillado dos veces al día y el uso del hilo dental para prevenir placa y caries.
4. Establece un horario para los dulces: Comer todos los dulces de una vez es mejor que picar todo el día, ya que disminuye la exposición prolongada al azúcar.
5. Visitas al dentista: Un chequeo regular antes y después de Halloween ayuda a detectar y prevenir problemas dentales.
Con estas simples prácticas, Halloween puede ser una experiencia divertida y saludable para todos.