En entrevista con Cristina González en La Mañana de Agricultura, el gobernador electo del Biobío, Sergio Giacaman, analizó los principales desafíos que enfrentará en su administración. Con un respaldo electoral del 72,67%, Giacaman destacó que su gestión se enfocará en resolver las problemáticas más urgentes de la región, como la seguridad, la reactivación económica y el combate a la corrupción.
“La crisis de confianza tiene mucho que ver con el mal uso de los recursos públicos”, afirmó, comprometiéndose a recuperar los fondos que han sido desviados y destinarlos a iniciativas prioritarias. En esa línea, señaló que los ciudadanos están cansados de las promesas vacías. “La gente espera que quienes estamos en política hablemos menos y hagamos más”, agregó, subrayando la importancia de pasar de las palabras a la acción.
Seguridad: una prioridad ineludible
La inseguridad es uno de los problemas más graves que afecta al Biobío, y Giacaman no eludió la urgencia del tema. “El año pasado hubo 99 asesinatos; ahora ya llevamos 108”, comentó, evidenciando un preocupante aumento en la violencia. Como respuesta, anunció su intención de construir nuevas subcomisarías en zonas críticas como Tomé, Cabrero y Los Ángeles, además de mejorar la infraestructura de seguridad en la región.
Otra de sus propuestas es implementar sistemas de monitoreo en los municipios para fortalecer la vigilancia y optimizar la coordinación con las fuerzas de seguridad. Giacaman destacó que medidas como estas son esenciales para recuperar la tranquilidad en localidades donde la violencia ha escalado.
Impulso económico para sectores estratégicos
El gobernador electo también abordó la difícil situación económica de la región, agravada por el cierre de operaciones en industrias clave como Huachipato. Para enfrentar este desafío, subrayó la importancia de reactivar sectores productivos como la pesca, la agricultura y la industria forestal. “El Biobío debe recuperar su rol como motor económico del país”, enfatizó.
Entre las medidas propuestas, destacó la reforestación de áreas afectadas por incendios, lo que beneficiará a las pymes forestales, y el fomento de proyectos portuarios para atraer inversión y generar empleo. Giacaman insistió en que estas iniciativas no solo revitalizarán la economía regional, sino que también devolverán al Biobío su posición estratégica en el desarrollo del país.