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La compañía trabaja para impulsar una economía circular, maximizar la eficiencia en el uso de los recursos y fomentar la cultura de reciclaje entre sus colaboradores, clientes, proveedores y la comunidad en general.

Reducir, reciclar y reutilizar son acciones que están en la agenda país y de la industria de alimentos. Es un tema de desarrollo sostenible que Carozzi, una compañía con 125 años de trayectoria, ha abordado por décadas para generar valor positivo en sus grupos de interés y el entorno.

Todo esto, en forma previa a la entrada en vigor de la Ley de Responsabilidad Extendida del Productor (N° 20.920), Ley REP), promulgada en mayo del 2016, que comenzará a regir en septiembre. Su foco es prevenir la generación de residuos y recuperar en función de una meta establecida un porcentaje de los envases y embalajes que se colocan en el mercado.

Según la normativa, “el que contamina paga”, lo cual obliga a los productores de aceites y lubricantes, aparatos electrónicos, baterías, envases y embalajes, neumáticos y pilas, a organizar y financiar la gestión de sus residuos. En el caso de los envases y embalajes las metas de recolección son a 12 años y aumentan gradualmente hasta llegar a 60% en envases de cartón para líquidos; 55% para envases metálicos; 70% para papel y cartón; 45% para envases plásticos y 65% para vidrio.

La visión de la Ley REP está recogida en la Estrategia de Sostenibilidad de Carozzi, que se apalanca en tres pilares: Planeta que Compartimos; Marcas para Disfrutar y Personas que nos Inspiran. Todo esto, bajo un concepto fundamental: Compartir Hace Bien.

Un foco esencial es la economía circular. “Uno de nuestros objetivos se basa en la reducción y el reciclaje de materiales para reducir el desperdicio y maximizar la eficiencia en el uso de los recursos”, afirma Luz María Rojas, gerente corporativo de Sostenibilidad y Marketing. Hoy el 98% de los productos ya cuenta con la ecoetiqueta Carozzi, “la cual permite a las personas conocer la materialidad de los envases, cómo reciclarlos y disponerlos correctamente”, explica.

Además, desde 2020 Carozzi participa en el Acuerdo de Producción Limpia de Ecoetiquetado, que busca certificar los envases reciclables en más del 80% de su peso. A la fecha se han certificado 327 productos de distintas categorías, ayudando a los consumidores a identificar con facilidad los envases reciclables a través del sello #ElijoReciclar. También se trabaja en la reducción del gramaje de los envases de plásticos, aluminio y cartulina, disminuyendo 400 toneladas entre 2020 y 2022.

Carozzi es una de las fundadoras de ReSimple, el primer Gran Sistema de Gestión Colectivo (GRANSIC) de residuos de envases y embalajes regido por la Ley REP. Su objetivo es organizar y financiar la recolección, transporte, reciclaje y valorización de los envases que las productoras colocan en el mercado, una vez que éstos llegan a su fin de vida.

“Fuimos parte de este proceso desde antes de la creación del sistema, lo que refleja nuestro sólido compromiso con el crecimiento sostenible y nuestra contribución a visibilizar la implementación de la Ley REP en Chile”, agrega Carlos Araya, gerente de Materiales de Carozzi.

En 2022, Carozzi se incorporó al Pacto Chileno de los Plásticos, que toma el desafío de transitar hacia una economía circular de los plásticos. “Una de las mejores formas de avanzar es de manera colaborativa, con la cadena de abastecimiento y proveedores, con las comunidades y otros actores. Buscamos repensar la forma en que producimos, usamos y disponemos los envases y embalajes, en favor del cuidado del entorno y el medioambiente, alineados a los objetivos del Pacto al 2025”, indica Luz María Rojas.

A esto se suman las actividades con la comunidad. Un ejemplo es el Piloto de Reciclaje de polipropileno flexible en San Bernardo, junto a la Municipalidad y la Fundación Revalora, con el fin de sensibilizar a la ciudadanía sobre el conocimiento, identificación y el reciclaje de este material utilizado en el envasado de alimentos. Gracias al apoyo de 15 Juntas de Vecinos de la comuna se recolectaron en 2022 más de 300 kilos de plástico flexible, que se transformaron en 5 estaciones de reciclaje que se entregaron a la comunidad.

En la actualidad casi el 90% de los residuos industriales de Carozzi se valoriza y la meta es ser una Compañía cero residuos a vertedero al año 2025.

La implementación de la Ley REP conlleva una serie de desafíos para las empresas productoras de envases y embalajes y requiere un cambio cultural. Es el puntapié inicial para avanzar hacia un modelo de economía circular en Chile, que solo será posible por medio del trabajo conjunto de la sociedad civil, las instituciones públicas y privadas, tras un objetivo común: prevenir la generación de residuos, fomentar el modelo de economía circular y contribuir al cuidado del medio ambiente y de la comunidad.

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