Siete años después de las movilizaciones en Francia contra el matrimonio homosexual, los opositores a la procreación médicamente asistida (PMA) de lesbianas y solteras desfilaron este domingo en París para pedir el retiro del texto a debatir por los diputados.
El desfile de opositores reunió a 74.500 personas según un recuento realizado por el gabinete Occurence para medios de comunicación como AFP.
Agitando banderas verdes y rojas con la inscripción “Libertad Igualdad Paternidad”, los manifestantes caminaron en el sur de la capital a pedido de un colectivo de unas veinte asociaciones opuestas a la ampliación de la PMA, medida emblemática de este proyecto de ley bioética.
“Desde hace casi dos años, nuestros intentos de diálogo no han tenido éxito (…) sólo queda la calle para ser escuchados”, declaró Ludovina de la Rochère, la presidenta del movimiento católico conservador Manifestación para todos, que también lideró la movilización contra el matrimonio homosexual hace siete años.
“Todos nacidos de un padre y una madre, esa es la igualdad” y “Privados de papá, ¿con qué derecho?”, fueron algunos de los lemas de las pancartas que enarbolaban los manifestates que combaten la “PMA sin padre”, oponiéndose a una extensión de la procreación asistida médicamente a lesbianas y solteras.
Christian Kersabiec, de 68 años, quien llegó en autobús desde Bretaña, rechazó “esta nueva sociedad, en la que se juega a los aprendices de brujos”. “La familia con padre y madre es un ecosistema que hay que proteger”, afirmó.
En tanto, para Laetitia de 20 años, “un niño es un don, no es un derecho”. “No luchamos contra los homosexuales, no decimos que su vida es mala, pero sí luchamos contra la legalización” de la PMA, explica.
La conferencia de obispos adoptó una posición intermedia. No dio instrucciones a los católicos para que fueran a la manifestación, aunque por la voz de su presidente, Eric de Moulins Beaufort, estimaba que era su “deber” hacerlo “si creen que es un medio útil para hacerse escuchar”.
AFP.